Powered By Blogger

jueves, 16 de febrero de 2012

El miedo reinante

Llevamos un tiempo, en que parece que todo está controlado.
Digo esto, porque esta tarde he estado en una manifestación de los empleados de Metro -empresa en la que trabajo- y he podido comprobar, como los medios de comunicación, han brillado por su ausencia.y algunos compañeros, no han querido ponerse en la cabeza de la manifestación y otros que si se han puesto en un primer momento, se han apartado posteriormente, disimuladamente. Creo que todo esto sucede por miedo. Me explico. He tenido la sensación de que los periodistas, acatando órdenes de sus jefes, no han ejercido como tales, por miedo a perder el puesto de trabajo. Mis compañeros "escaqueados", se han retirado de la cabeza de la manifestación, porque no quieren que les vean, para no significarse.
Comprendo que los momentos son difíciles, pero esto no justifica ninguna de las dos acciones. En le primer caso, porque el periodista, que es capaz de fotografiar a un soldado pegándole un tiro en la cabeza una persona, exponiéndose a que le den otro a él, en este caso, teme más a una bronca de su jefe. Los trabajadores, que desde tiempos inmemoriales estamos luchando por nuestro puesto de trabajo y nuestros derechos como tales, ahora tememos que si nos significamos, se fijen en nosotros y nos apunten en la supuesta lista negra.
Si no es por estas razones, no entiendo ninguna de estas actitudes. Si este va a ser el grado compromiso de la sociedad y los individuos, con la situación que estamos viviendo, ya os digo que partimos de una postura muy débil. Es necesario que comprendamos que en esta lucha, nada va ser gratis. Es decir, podemos resultar golpeados por la policía, sancionados por nuestra empresa, o, el peor de los casos, incluso despedidos. Pero, yo me hago una pregunta ¿En tan poco valoramos nuestra dignidad como personas como para no hacer, por miedo,  aquello que debemos? ¿Vamos a doblar la cerviz antes de que la lucha haya empezado?. Esto no es demagogia, es necesidad de lucha, pura y dura
En fin...Espero que no solo sea una sensación mía y que esto no suceda, porque de ser así, nos vamos a ver en muy malas condiciones, como persona, como trabajador y como miembros de una colectividad. En la disertación anterior, ya hable de la necesidad de empezar a usar los resortes de los que disponemos, como arma de lucha diaria contra lo que nos quieren hacer. Ahora me reafirmo; por favor, protestad. Siempre que os veáis en una situación injusta o desagradable, protestad. Por escrito, de palabra o del modo que sea. Tenemos que hacer ver todo lo que está mal en nuestro país, para que no puedan decir que no es así, los que están haciéndonos la puñeta. No tengáis miedo a hacerlo. Ya que ese derecho, al menos por ahora, lo tenemos, utilicémoslo. Con el tiempo conseguiremos que se nos tenga en cuenta.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario