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lunes, 16 de enero de 2012

LA INJUSTA "JUSTICIA"

En el caso de Marta del Castillo, se ha podido comprobar una vez más lo que ya he dicho en otras ocasiones. En mi opinión los jueces de nuestro país, son meros "aplicadores de la ley". Son tan cortitos, que no son capaces de ver que tienen en sus manos, no solo aplicar la ley, también aplicar justicia. Desde el punto de vista humano, si bien por un lado tienen la obligación de garantizar los derechos de los ajusticiados, también tienen la obligación, no solo legal, si no también moral y ética de garantizar el resarcimiento del que recibe el dolo. El fin primordial del proceso judicial, debiera ser, sobre todo, la aplicación de lo que marca la ley, de forma justa para todas las partes que actúan en el proceso.
Lo que no debiera consentirse, es que la sociedad no tenga armas para defenderse de la maldad de unos niñatos que no han tenido ningún tipo de miramiento por la que se supone que era su amiga, haciéndola sufrir, según se ha publicado, antes de matarla. Se me ocurre que una de estas armas, podría ser que no se celebrara el juicio hasta que no hubieran dicho donde se encuentra el cuerpo de Marta. Su familiares, tienen el derecho de saberlo y darle sepultura. Hasta en eso, han sido crueles estos desgraciados.
 Está meridianamente claro, que no tienen el más mínimo sentimiento humano para con las personas a las que han hecho daño. ¿Por qué la sociedad debe tener miramientos con ellos? ¿Acaso se merecen que se les respete ningún derecho, cuando ellos no han sabido respetar el primordial que tenía Marta; el derecho a la vida?.
Esta sociedad, habrá evolucionado en algunas cosas, pero, desde luego, en la justicia y la humanidad hacia las personas, no se ha movido lo más mínimo. Es más, en mi opinión, vamos para atrás.
Esperemos que rectifiquemos a tiempo, porque de no hacerlo, acabaremos pudriéndonos en el pozo de la soberbia, la venganza y el más absoluto desprecio por nuestros semejantes

1 comentario:

  1. estoy completamente de acuerdo, y para mí, a estos jueces que no hacen nada bien su trabajo, deberían cesarlos de su puesto, así aprenderian, creo yo.

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