Parece que no hay otras consecuencias de esta mal llamada crisis -yo le
llamo pura estafa-, cuando no son noticia en la vendida prensa oficial y oficiosa. Cosas como la angustia que se ha causado a las personas dependientes, que
estando solos y postrados en una cama, por culpa de los recortes en este asunto, ya no va nadie a limpiarles ni asearles,
si no lo hacen los voluntarios sociales. O el daño causado a las personas
mayores a las que se les ha robado el autobús que los transportaba al centro de
día, única distracción posible para ellos. O la asignación para asistencia domiciliara
a impedidos físicos. Estan robando a los más necesitados.
Teniendo en cuenta que todo este daño, se está causando para llenar la
bolsa de los banqueros, ¿No se puede considerar a los políticos que lo han
decidido como verdaderos criminales sin humanidad, ética, principios y vergüenza
alguna? ¿Tienen derecho a enarbolar haber sido elegidos? ¿Es ético gobernar en contra de las necesidades de aquellos que te han votado? ¿No se puede denunciar en ningún tribunal internacional esta estafa a todo un pais? ¿Será que los jueces y fisclaes tambien están en el ajo?. Máxime, cuando los que gobiernan se erigen en veladores de la moral “cristiana,
católica-apostólica-romana". Estos sinvergüenzas, pretenden, encima, dar
lecciones de moral a los demás. Y los “representantes de su dios en la tierra”,
les apoyan. Estos tienen aún más delito, por cuanto la labor que estan desempeñando, es la contraria de la que debieran estar llevando a cabo. Deberían
proteger a los más débiles, a los más necesitados y a los más pobres, que en
definitiva son todos uno. Así se lo ordena su religión. Parece que no hayan leído
la biblia o no se acuerden de lo que dice Cristo respecto a esto “Dejad
vuestras riquezas a los pobres y seguidme”. Algunos de estos llamados curas, -Obispos,
Cardenales, etc-, llevan en su mano el símbolo de su poder. Un anillo,
normalmente de oro, cuando no de platino y brillantes, con el que podrían
solucionar más de un problema a algún necesitado. No se les alcanza a pensar en
eso y si lo piensan, no le remuerde la conciencia. Sencillamente, por que no la
tienen, ni es previsible que la tengan núnca.
Desgraciadamente, toda esta caterva de sinvergüenzas, están teniendo la
ayuda de los pasivos que no son capaces de mover el culo para intentar que
estas cosas no sucedan. Desde esa pasividad, son peores que estos cerdos, ya
que son consentidores de que estén haciendo estas cosas. Si en la calle, cuando
se convoca una manifestación, estuvieran los cinco millones de parados, las
doscientas mil familias desahuciadas, los miles de pequeños empresarios
arruinados por el impago de los mafiosos municipales y en definitiva, toda la población,
estoy seguro de que los enfermos de avariciosis, que amontonan tanto dinero innecesariamente,
se lo pensarían dos veces.
Esperemos que no tardemos mucho en despertar, porque si consolidan su forma
de gobernar, nos van dar por atrás a todos durante muchos años.
Pensad en vuestros hijos y nietos y en que les vais a contestar cuando os
pregunten por qué están pasándolo tan mal.
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